Esta rosa da descanso. Esta en la gama del amarillo, o es blanca y le da directamente la luz? Muy buena foto, buen fondo con la mesa de madera tan brillante. (bueno creo que es una mesa) Las tiritas tambien estan muy bien seleccionadas.
Como verás, ehrre, a veces las cosas son más sencillas de lo que parece... sólo es proponérselo. Generalmente, la solución más fácil a cualquier problema, es la más evidente. Un rosa sin espinas? ahí la tienes. Así que centrémonos ahora en el miedo. Hasta donde mi entender llega, la solución para el miedo es afrontarlo. Y quizás una mano a la que agarrarse... eso también ayuda. Aquí hay un par de ellas, llenas de cicatrices, por si son útiles, llegado el caso.
Las espinas, poco a poco, y con paciencia, irán saliendo...
Celebro que te haya gustado (ya no contaba con que lo vieras, ahora ya sé que no sólo visitas mi blog, sino que incluso haces scroll.) La rosa es una de mis fotografías más logradas a nivel técnico hasta la fecha, y la idea te la debo a ti. Comprar la rosa fue el paso más sencillo de todo el proceso...
Todo un caballero...
ResponderEliminar(y yo. ¿qué podría darle?)
No sé... esto es que lo pidió ella... "sin espinas, por favor," dijo...
ResponderEliminarEsta rosa da descanso. Esta en la gama del amarillo, o es blanca y le da directamente la luz? Muy buena foto, buen fondo con la mesa de madera tan brillante. (bueno creo que es una mesa) Las tiritas tambien estan muy bien seleccionadas.
ResponderEliminarno sé cómo no había visto ésto antes, cuando aún había remedio.
ResponderEliminarahora me toca desincrustarme, una a una y con paciencia, las espinas (que ojalá estuvieran sólo en los dedos) y así poder coger la tuya. sin miedo.
sin miedo. eso sí que es paz.
(gracias :)
Como verás, ehrre, a veces las cosas son más sencillas de lo que parece... sólo es proponérselo. Generalmente, la solución más fácil a cualquier problema, es la más evidente. Un rosa sin espinas? ahí la tienes. Así que centrémonos ahora en el miedo. Hasta donde mi entender llega, la solución para el miedo es afrontarlo. Y quizás una mano a la que agarrarse... eso también ayuda. Aquí hay un par de ellas, llenas de cicatrices, por si son útiles, llegado el caso.
ResponderEliminarLas espinas, poco a poco, y con paciencia, irán saliendo...
Celebro que te haya gustado (ya no contaba con que lo vieras, ahora ya sé que no sólo visitas mi blog, sino que incluso haces scroll.) La rosa es una de mis fotografías más logradas a nivel técnico hasta la fecha, y la idea te la debo a ti. Comprar la rosa fue el paso más sencillo de todo el proceso...