viernes, 22 de abril de 2011

lA cHica

Sé que ando un poco perdido. Entre otras cosas porque no tengo tiempo para casi nada, aunque en mi descargo diré, que lo avisé de un modo oficial.

El poco tiempo del que dispongo ahora, algunos ya sabéis que lo dedico a mi gran pasión, la fotografía. Quizá me juzgaréis de cómodo, pero es una gran verdad que con una cámara se cuentan historias en mucho menos tiempo que escribiéndolas.

Así que el fin de semana pasado, se me ocurrió tomar la cámara con la batería bien cargada, un par de tarjetas de memoria, y tras llenar el depósito del coche, salir disparado a pasar un día de "safari" en Murcia.

No es que sea un aficionado acérrimo de la Semana Santa, pero sí es verdad que muchos de sus pasos, creados por ese genial escultor que fue Salzillo, son dignos de verse, y además Murcia tiene un conjunto monumental nada despreciable, así que no lo dudé. Mi conclusión es que he de volver, entre otras cosas porque me consta que hay grandes puntos de interés por toda la provincia.

El domingo pasé un apacible día de paseo, fotografía y contemplación en la ciudad, que ya conocía un poquito por tener familia allí. Y pronto obtuve la recompensa a tan largo viaje. Estaba agachado en medio de la acera, absorto en la contemplación de la portada del museo Almudí, especialmente en una bella escultura en forma de mujer en bicicleta, calculando mentalmente los ajustes de la cámara para hacer una foto en la que la bici diese sensación de movimiento, cuando escuché una voz femenina que me decía:

Perdona, tengo que pasar...

Me incorporé y ante mis ojos apareció una chica alta, de cabello lacio y rubio, con unos preciosos ojos azules y una mirada penetrante. Llevaba una túnica de un verde oscuro muy elegante, y un capuz dorado en su mano derecha.

Tengo un poco de prisa, me dijo, mientras yo la observaba de arriba abajo, y entonces, no sé por qué, lo hice:

Espera, tienes mucha mucha prisa? como para una foto?

Realmente no recuerdo lo que me contestó, ni sí ni no, sólo que con todo el descaro del mundo, ajusté la exposición, encuadré, y disparé a todo lo que dió la ráfaga de la cámara.

Lástima que con la turbación del momento, ni siquiera se me ocurrió pedirle permiso para publicarla... Estas fotos, 7 para ser exactos, pasan a partir de hoy a formar parte de mi tesoro privado.

Me pregunto quién sería esa chica, y si algun día la volveré a ver...

Este post está aquí rompiendo mi tregua, porque así lo han deseado y manifestado abiertamente 3 mujeres: Ana pepinillo, Musicalera y la niña del sur... a las tres, un abrazo, y gracias por pasar!

9 comentarios:

  1. Le tenías que haber pedido el teléfono... ainsss se te pierden las mejores jajaja Un besazooo

    PD: GRACIAS por volver...

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  2. jaja, que me meoooo :)

    [Por cierto, tomo noto de que ser "hermana" me excluye de mi condicion de "mujer" que te pide que escribas;)]

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  3. La hermanas son mujeres?

    (jajajjaja)

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  4. Lo de Ada y el aeropuerto fue bueno. Lo de la piscina de Sara fue casi inmejorable... Pero esto merece un Oscar !!. Bravo Mister !!

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  5. Ese tesoro privado llegará algún momento ya verás, que será descubierto y le enseñarás a esa chica alta rubia de ojos azules la foto que ella ni sabía que tu la tenías.
    Siempre pasa lo mismo con las fotos que no se guieren enseñar.

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  6. tantas cosas tienes que explicarme tú a mí como yo a ti.

    vuelve a volver pronto.

    por favor.

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